El viernes 5 y sábado 6 de abril desde las 19 horas se presentarán las piezas teatrales y el valor de la entrada es de $2.000. Los interesados pueden reservar en www.salateatroupla.cl

Este año la extensión  del  Festival  tiene una significación especial, ya que al actor y ex docente del Departamento de Artes Escénicas de la UPLA Humberto Duvauchelle, a quien los estudiantes homenajearon con la creación de este  certamen en 2012 falleció, en enero pasado a los 89 años.

El certamen  fue creado por estudiantes de la Carrera de Teatro de la  UPLA y su propósito fue incentivar la creación y profesionalización teatral durante el proceso de formación universitaria de los futuros trabajadores teatrales de la región de Valparaíso, inspirándose en la figura de Duvauchelle, quien durante sus años de profesor, y maestro de muchas generaciones de actores siempre inspiró la perseverancia y disciplina teatral.

En estos siete años de  Festival, se han presentado más de 40 obra breves escritas y dirigidas por estudiantes de teatro de las tres escuelas que existen en la región, Universidad de Valparaíso, Duoc UC y Universidad de Playa Ancha.

PROGRAMA

“La fiesta de los que nunca nadie recordaba”, escrita por Camila Ramírez, nos muestra un contexto popular, de hostilidad,  pobreza, descontento con el mundo en un liceo, un grupo de jóvenes indignados con ellos mismo y la sociedad en la que viven  llegan a un acuerdo para crear un escenario que termine con las desigualdades sociales de siglos y siglos en su país. Escogen a los y las  valientes  que pueden hacer de su utopía una realidad.

“Diormna”, escrita y dirigida  por Jorge Cárdenas. Para los tres personajes que protagonizan esta historia  los problemas y disgustos con la sociedad son un tema común.  La obra trata de reflejar el típico comportamiento de aceptación ante una sociedad que nos otorga un modo de ‘’vivir más cómodo’’.  Siendo víctimas del ego, la religión, la rutina, el trabajo, la envidia.

“Leviatán” de Gonzalo Zúñiga,  nos presenta un personaje nacido y criado en la elite de nuestra sociedad. ÉL, sinónimo de catolicismo y absolutismo moral, representa a los que crearon los márgenes institucionales de la copia feliz del Edén. Leviatán propone reflexionar acerca de los “poderosos”, de los que a costa de excluir a  muchos pretenden ser  pocos.