«Potestad», escrita en 1987, es una obra que aborda el tema de la represión, la tortura y la desaparición de personas, desde la óptica de un ex represor, un fenómeno complejo que nos muestra a esta pieza teatral no sólo como la gran creación dramática que es, sino también como una metáfora sobre los males que sufre nuestra sociedad, como lo son la hipocresía, la falta de solidaridad y el egoísmo de los seres humanos.
“Potestad” según las expresiones su autor, el Eduardo Pavlovsky “surge como necesidad de hablar de este fenómeno, de este nuevo tipo de monstruosidad que nació en la dictadura”
A partir del concepto del monstruo cotidiano este es un monólogo fragmentado y distorsionado en torno de un hombre torturado por sus recuerdos, que necesita ordenar su mundo caótico, a través del cual se develará una realidad insospechada, una verdad vinculada directamente con el origen de su dolor.